domingo, 31 de julio de 2016

Carlo Gesualdo. Miserere.

El salmo cincuenta, conocido como el Miserere por su primera letras, es uno de los textos más conmovedores de todo el Antiguo Testamento. Se considera compuesto a propósito del pecado que David cometió con Betsabé, haciendo morir a su marido Urías. Reprochado por medio del profeta Natán, se arrepintió David de su pecado, y expresó a través de este salmo su dolorida conversión.

Sobre este texto se han compuesto obras musicales excepcionalmente bellas. Ya hemos escuchado anteriormente los de Allegri y Josquin de Pres. Hoy escucharemos la obra que Carlo Gesualdo compuso sobre este tema, de una sobriedad y altura mística extraordinarias.



Miserere mei, Deus, secundum magnam misericordiam tuam. 

Et secundum multitudinem miserationum tuarum, dele iniquitatem meam. 

Amplius lava me ab iniquitate mea: et a peccato meo munda me. 

Quoniam iniquitatem meam ego cognosco: et peccatum meum contra me est semper. 

Tibi soli peccavi, et malum coram te feci: ut justificeris in sermonibus tuis, et vincas cum judicaris. 

Ecce enim in iniquitatibus conceptus sum: 
et in peccatis concepit me mater mea. 

Ecce enim veritatem dilexisti: incerta et occulta sapientiae tuae manifestasti mihi. 

Asperges me hyssopo, et mundabor: lavabis me et super nivem dealbabor. 

Auditui meo dabis gaudium et laetitiam: et exsultabunt ossa humiliata. 

Averte faciem tuam a peccatis meis: et omnes iniquitate meas dele. 

Cor mundum crea in me, Deus, et spiritum rectum innova in visceribus meis. 

Ne projicias me a facie tua: et spiritum sanctum tuum ne auferas a me. 

Redde mihi laetitiam salutaris tui: et spiritu principali confirma me. 

Docebo iniquos vias tuas: et impii ad te convertentur. 

Libera me de sanguinibus, Deus, Deus salutis meae et exsultabit lingua mea justitiam tuam. 

Domine, labia mea aperies: et os meum annuntiabit laudem tuam. 

Quoniam si voluisses sacrificium, dedissem utique: holocaustis non delectaberis. 

Sacrificium Deo spiritus contribulatus: cor contritum et humiliatum, Deus, nos despicies. 

Benigne fac, Domine, in bona voluntate tua sion: ut aedificentur muri Jerusalem. 

Tunc accetabis sacrificium justitiae, oblationes et holocausta: tunc imponent super altare tuum vitulos. 


Ten misericordia de mi, oh Dios: conforme a tu gran misericordia. 

Y conforme a la multitud de tus piedades, borra mi maldad. 

Lávame enteramente de mi culpa, y límpiame de mi pecado. 

Porque yo conozco mi maldad, y mi pecado está siempre ante mis ojos. 


Contra ti solo he pecado, y hecho lo malo delante de ti: porque te justifiques en tus palabras, y venzas en tu juicio. 

He aquí que en iniquidades fui engendrado, y en pecados me concibió mi madre. 
He aquí que amas la verdad: me has manifestado los misterios y secretos de tu sabiduría. 
Rocíame con hisopo y seré limpio: lávame, y seré emblanquecido más que la nieve. 
Hazme oir el gozo y la alegría, y saltarán de placer mis huesos apocados. 

Aparta tu rostro de mis pecados, y borra todas mis iniquidades. 

Crea en mi, oh Dios, un corazón puro y renueva dentro de mi un espíritu recto. 

No me eches de tu presencia, y no quites de mi tu santo espíritu. 

Devuélveme el gozo de tu salvación, sosténgame un espíritu de príncipe. 

Enseñaré a los pecadores tus caminos, y los impíos se convertirán a ti. 

Líbrame de toda sangre, oh Dios, de mi salud, y cantará mi lengua tu justicia. 


Señor, abrirás mis labios, y mi boca anunciará tu alabanza. 

Porque si hubieras querido sacrificio, yo lo hubiera ofrecido: mas no te serán agradables los holocaustos. 

Para Dios es sacrificio un espíritu atribulado: el corazón contrito y humillado, oh Dios, no lo despreciarás. 

Haz bien, oh Señor, con tu buena voluntad a Sión: para que sean edificados los muros de Jerusalén. 
Entonces aceptarás el sacrificio legítimo, las ofrendas y holocaustos: entonces ofrecerán sobre tu altar becerros. 

jueves, 28 de julio de 2016

Morales. Magnificat en I tono

Escuchamos el Magnificat en I tono de Cristóbal de Morales, interpretado por el grupo Pro Arte Singers de la Universidad de Indiana, dirigido por Gregory Jon Geehern.

miércoles, 27 de julio de 2016

Mozart. Requiem aeternam

Hoy queremos expresar nuestro dolor por la muerte del sacderdote francés Jacques Hamel a través de una plegaria que, en sus pocas palabras, resume nuestra fe en las tristes circunstancias de la muerte: Requiem aeternam dona eis Domine, et lux perpetua luceat eis. Es decir, Dales, Señor, el descanso eterno, y brille para ellos la luz perpetua.

martes, 26 de julio de 2016

Charpentier. Gaude felix Anna

Hoy celebramos la memoria de los santos Joaquín y Ana, padres de la Virgen maría. Ambos gozaron tanto en Oriente como en Occidente de gran veneración en la Antigüedad. La leyenda nos presenta a dos ancianos que no habían tenido hijos, siendo finalmente bendecidos por el Señor con una hija, a la que consagran al servicio de Dios: la virgen maría.

Sobre la prosa medieval Gaude felix Anna, compuso el músico francés Marc-Antoine Charpentier un motete para dos voces femeninas. el resultado es una pieza de gran hermosura, típica del barroco francés. La escuchamos en la versión grabada en la Universidad de Nueva York en 2011 a cargo de las sopranos Nia Rhein y Leanne Thorburn.



Gaude felix Anna
quae concepisti prolem
quae paritura erat mundi salvatorem.
Gaude felix Anna 
mater magnae prolis ex te processit
rutilans stella summi solis.
Gaude felix Anna
genetrix Mariae quae Deum virgo peperit
et es mater Mariae.
Gaude felix Anna
quae sola meruisti
ut esses mater virginis matris Jesu Christi.


Alégrate, feliz Ana, que concebiste como hija a la que habría de dar a luz al salvador del mundo.
alégrate, feliz Ana, madre de la gran prole que de ti saldría, como la estrella brillante precede al sol radiante.
Alégrate, feliz Ana, madre de María, que dio a luz a Dios, y eres madre de María.

Alégrate, feliz Ana, tú que fuiste a única digna de ser madre de la virgen madre de Jesucristo.

lunes, 25 de julio de 2016

Códice Calixtino. O Adiutor


Como preparación para la solemnidad del apóstol Santiago, escuchamos hoy una de las más hermosas piezas del Códice Calixtino, la obra del siglo XII compuesta en el entorno de Cluny que contiene la liturgia celebrada en la Catedral Compostelana, precisamente en el momento de mayor apogeo de la peregrinaciones jacobeas El responsorio O Adiutor que hoy escuchamos es un típico responsorio medieval, escrito sobre el primer tono, y muy adornado con escalas musicales, que le dan gran solemnidad. El texto contiene la petición de la intercesión del apóstol: Oh auxilio de todos los siglos, oh gloria de los apóstoles, oh luz clara de los gallegos, Apóstol Santiago, socórrenos en todas las circunstancias.

La interpretación es la que grabaron los monjes de Silos el año 1969, en un disco que contiene piezas del Calixtino junto a otras mozárabes, que puede ser considerado como uno de sus mayores logros artísticos. El reportaje viene acompañado de imágenes de la catedral compostelana. 

domingo, 24 de julio de 2016

Cristóbal de Morales. Requiem.

El Evangelio de este domingo nos invita a dirigirnos con confianza a Dios, nuestro Padre. Pedid y se os dará, dice el Señor. Por eso, le pedimos que acoja con misericordia a nuestros hermanos difuntos. Para ello, hemos escogido una de las piezas más impresionantes del repertorio polifonico: el Requiem a cinco voces de Cristóbal de Morales. Lo interpreta el Gabrielli Consort, dirigido por Paul McCreesh. 



Requiem æternam dona eis, Domine, 
et lux perpetua luceat eis.

Te decet hymnus Deus, in Sion, 
et tibi reddetur votum in Ierusalem.
Exaudi orationem meam; 
ad te omnis caro veniet.

Requiem aeternam dona eis, Domine, 
et lux perpetua luceat eis.


Concédeles Señor el descanso eterno, 
y que brillé para ellos la luz perpetua.

En Sion cantan dignamente tus alabanzas.
En Jerusalén te ofrecen sacrificios.
Escucha mis plegarias,
Tú, hacia quien van todos los mortales.

Concédeles Señor el descanso eterno, 
y que brillé para ellos la luz perpetua.

sábado, 23 de julio de 2016

Quinque prudentes virgines.

Santa Brígida, cuya fiesta hoy celebramos, fue una de las vírgenes prudentes, que hicieron acopio del aceite de las virtudes para esperar en la noche a su Señor. Esta es la antífona de comunión que la liturgia destina a mujeres, como la santa que hoy celebramos. Esta pieza gregoriana es un prodigio de sencillez y belleza. Vamos a escucharla, interpretada por el coro de monjes del Monasterio de San Benito de Sao Paulo.

miércoles, 20 de julio de 2016

Joseph Haydn. Misa Harmoniemesse. II

Escuchamos la segunda parte de la de la Misa Armónica de Haydn, compuesta en 1802, en la versión del Coro y Orquesta de la Radio de Baviera, en una grabación en directo desde la Iglesia de San Miguel, en Munich.

martes, 19 de julio de 2016

Joseph Haydn. Misa Harmoniemesse. Kyrie

Escuchamos hoy el Kyrie y el Gloria de la de la Misa Armónica de Haydn, compuesta en 1802, y que recibe su nombre de la notable orquestación de la obra. Escuchamos la versión del Coro y Orquesta de la Radio de Baviera, en una grabación en directo desde la Iglesia de San Miguel, en Munich.

lunes, 18 de julio de 2016

Himno Querúbico

Nos desplazamos a la zona oriental del cristianismo europeo, para escuchar el himno cherúbico, es decir, el Sanctus latino, cantando por el coro de monjes del monasterio ruso de Valaam.

sábado, 16 de julio de 2016

Haendel. Vísperas de la Virgen del Carmen

El célebre compositor alemán Georg Friedrich Haendel compuso en su juventud, durante su estancia en Roma el año 1707 unas vísperas en honor de la Santísima Virgen del Carmen. De esta monumental obra, vamos a escuchar el motete Seviat Tellus: la tierra tiembla entre angustias; de ataques y de tormentas, carmelitas, no temáis.


1. Saeviat tellus inter rigores:
Impete, turbine, Carmelitae ne pavete.
Fremat Lucifer inter ardores,
artibus: astibus ditis minas irridete.
2. Carmelitarum ut confirmet ordinem
dormienti Hororio Virgo apparet
cuius luce nox coruscat et lux augetur
cum qua si confertur una
turpis est Sol turpis est Luna.
3. O nox dulcis, quies serena
Carmelitis sis longa, sis stabilis
No te turbet tristis Megaera
dum Mariae lux nitet amabilis.
4. Stellae fidae, vobis sit cura
Carmelitas mundo servare
Vestra pax sit firma et secura
qua mortales debent beare
5. Sub tantae Virginis tutela
Carmelitae triumphate
imbellis est Lucifer, innoxia sunt tela;
Carmelitae jubilate.
6. Alleluia

viernes, 15 de julio de 2016

Silesius. Ich will dich lieben

Angelus Silesius (25 de diciembre de 1624 – 9 de julio de 1677), fue un poeta religioso germano nacido en Breslavia, en la antigua región alemana de Silesia (ahora parte de Polonia). Nació en el seno de una familia luterana. Su verdadero nombre era Johann Scheffler pero es más conocido por su seudónimo, que eligió en honor de su región de nacimiento y con el cual firmaría todos sus poemas.

En 1653 se convirtió al catolicismo, en 1661 fue ordenado sacerdote, convirtiéndose en asistente del obispo de Breslavia. Después de una temporada en la Colegiata de San Matías de Breslavia, sumido en la pobreza total, dado al ayuno y las prácticas ascéticas, muere a los 53 años de edad.

La más importante y conocida de sus obras lleva el título de Rimas espirituales, que después fue llamada El Peregrino Querubínico o Querúbico (Cherubinischer Wandersmann), considerada la obra más importante del misticismo europeo de la época. Esta obra es básicamente una colección de aforismos rimados. Sus versos recorren los grandes temas y sutiles paradojas del misticismo cristiano desde esta perspectiva: la eternidad en el tiempo, la dependencia entre Dios y el hombre, el abismo insondable de Dios, el desprendimiento o la vacuidad y la pobreza espirituales, para lo cual Silesius se inspiró en obras de autores como Jakob Böhme, Maestro Eckhart, Juan Taulero, Blois, y San Juan de la Cruz.

Escuchamos uno de sus poemas más hermosos: Ich will dich lieben: Te quiero amar, mi fuerza.


Ich will dich lieben, meine Stärke,
ich will dich lieben, meine Zier,
ich will dich lieben mit dem Werke
und immerwährender Begier;
ich will dich lieben, schönstes Licht,
bis mir das Herze bricht.

Ich will dich lieben, o mein Leben,
als meinen allerbesten Freund;
ich will dich lieben und erheben,
solange mich dein Glanz bescheint;
ich will dich lieben, Gottes Lamm,
als meinen Bräutigam.

Ach, dass ich dich so spät erkannte,
du hochgelobte Schönheit du,
dass ich nicht eher mein dich nannte,
du höchstes Gut und wahre Ruh;
es ist mir leid, ich bin betrübt,
dass ich so spät geliebt.

jueves, 14 de julio de 2016

Strauss. Danza de los Siete Velos, de Salomé

Dentro de nuestro ciclo de música escénica, recurrimos hoy a la ópera Salomé, de Richard Strauss. Esta ópera fue estrenada en 1905 en Dresde, después de haber sido prohibida en Viena por escandalosa. Strauss escribió el libreto basándose en el drama homónimo de Oscar, quien a su vez se había inspirado a su vez en el pasaje bíblico del martirio de san Juan Bautista. 

El pasaje que se ha hecho célebre de esta ópera es la llamada Danza de los Siete Velos. La música y la danza consiguen el efecto de hacer perder la cabeza al rey Herodes, provocando finalmente la ejecución de san Juan Bautista.

martes, 12 de julio de 2016

Canto georgiano

Nos gusta, de vez en cuando, recurrir a tradiciones espirituales y musicales cristianas del Oriente, con los que tanto nos une, con quienes las diferencias doctrinales son tan escasas, pero con quienes nuestro desconocimiento es tan grande. Hermanos nuestros han mantenido la fe cristiana en situaciones especialmente adversas, y nos dan ejemplos tan bellos de oración. Hoy vamos a escuchar un canto procedente de la tradición georgiana y rusa.

lunes, 11 de julio de 2016

San Benito. Laeta dies

Hoy celebramos los monjes la solemnidad de nuestro Padre san Benito. En su honor vamos a escuchar la secuencia Laeta dies, un himno de alabanza a Dios por los abundantes que derramó sobre san Benito.



Laeta dies magni ducis,
Dona ferens novae lucis,
Hodie recolitur.

Caris datur piae menti,
Corde sonet in ardenti,
Quidquid foris promitur.

Hunc per callem orientis
Admiremur ascendentis
Patriarchae speciem.

Amplum semen magnae prolis
Illum fecit instar solis
Abrahae persimilem.

Corvum cernis ministrantem,
Hinc Eliam latitantem
Specu nosce parvulo.

Elisaeus dignoscatur,
Cum securis revocatur
De torrentis alveo.

Illum Joseph candor morum,
Illum Jacob futurorum
Mens effecit conscia.

Ipse memor suae gentis,
Nos perducat in manentis.
Semper Christi gaudia.


   Hoy se celebra el gozoso día del gran Cau­dillo, que nos trae los dones de una nueva luz.

     Gracia se da al alma pia­dosa; re­suene, pues, en el corazón fervoroso cuanto exteriormente se publica.
   
  Admiremos el esplendor del Patriar­ca que asciende por la senda del O­riente.


     La vasta estirpe de su gran familia le ha hecho resplan­decer cual otro sol, a seme­janza de Abraham.

     Mira el cuervo cómo le sirve y le reconóce en la an­gosta ca­verna, cual Elías, escondido.

     Se parece a Eliseo, cuando del cau­ce del río hace subir la segur.


     El entendimiento le paran­gona a José por la pureza de costumbres, y a Jacob por los vatici­nios.

     Que él, pues, acordándose de sus hijos, nos conduzca a los gozos de Cristo siempre perdu­rable. Amén.

domingo, 10 de julio de 2016

Solemes. Ordinario III

En honor de nuestro santo Padre Benito, escuchamos el Ordinario III de la Misa, cantado por el coro de monjes de Solesmes. Se trata de las partes fijas de la misa, es decir, Kyrie, Gloria, Sanctus y Agnus. Este Ordinario suele cantarse en las solemnidades.

sábado, 9 de julio de 2016

Mascagni. Regina Coeli.

No es extraño encontrar en la música operística fragmentos de música sagrada sublimes. Uno de estos momentos es el Regina Coeli de la ópera Cavalleria Rusticana, una tragedia del sur italiano, compuesta por Pietro Mascagni, que alcanza en este momento cumbres líricas impresionantes. Sirva, pues, como oración para este sábado.

viernes, 8 de julio de 2016

Massenet. Meditación de Thais.

Seguimos en nuestro ciclo de música escénica con un nuevo compositor francés, Jules Massenet,  y una obra, Thais, que ya hemos programado anteriormente. La ópera cuenta la historia de esta cortesana de Alejandría, a la que fue a convertir un monje, resultando finalmente que él cedía a la pasión y se perdía a sí mismo, mientras ella, convertida por su palabra, encontraba finalmente su salvación en Dios.

El fragmento que hemos seleccionado es el célebre intermedio, cuya melodía se emplea para la escena final de la obra. Se ha dado en llamar a esta pieza la Meditación de Thais. Escuchamos la versión de Antal Zalai al violin acompañado por la Orquesta Sinfónica de Viena, dirigida por Fabio Luisi. En una concierto celebrado en la Musikverein de Vienna, el 3 de abril de 2010.

jueves, 7 de julio de 2016

Otello de Verdi: Ave Maria

En su ópera Otello, la penúltima que compuso, Verdi compuso un célebre Ave Maria, que se considera como una de las mejores partituras del maestro italiano. Desdémona, la fiel esposa del moro Otello, se ve asediada por las injustas insidias que la acusan de infidelidad, acusaciones que terminarán provocando su asesinato a manos de su celoso y engañado marido. Pocos instantes antes de este desenlace, en su lecho, Desdémona invoca a santa María, con esta intensa oración. Hemos escogido la interpretación de la soprano japonesa Kiri Te Kanawa, durante la representación de Otello en el Coven Garden de Londres, el año 1992.


Ave Maria, piena di grazia, eletta
fra le spose e le vergini sei tu,
sia benedetto il frutto, o benedetta,
di tue materne viscere, Gesù.
Prega per chi adorando a te si prostra,
prega nel peccator, per l'innocente,
e pel debole oppresso e pel possente,
misero anch'esso, tua pietà dimostra.
Prega per chi sotto [animando] l'oltraggio piega
la fronte e sotto la malvagia sorte;
per noi, per noi tu prega, prega
sempre e nell'ora della morte nostra,
prega per noi, prega per noi, prega.
Ave Maria. . .
nell'ora della morte.
Ave!. . .Amen!

miércoles, 6 de julio de 2016

Verdi. Va pensiero, de Nabucco.


En este ciclo que estamos dedicando a la música escénica de carácter religioso, no queremos abandonar la obra de Verdi sin citar una partitura que caló hondamente en los italianos: el Va Pensiero, de su ópera Nabucco. La obra trata de la historia del pueblo hebreo, cautivo en Babilonia tras la destrucción de Jerusalén. El rey Nabucco, ensoberbecido por su victoria, desafía a Dios, y es castigado con la pérdida de su razón, tal como narra el libro de Daniel. Oprimido por la esclavitud, entona el pueblo este gran coral, cuyo texto evoca el salmo 131: Junto a los canales de Babilonia nos sentamos a llorar con nostalgia de Sión. La interpretación que hemos escogido proviene de la representación del Nabucco de Verdi en el Metropolitan Opera House de Nueva York, el año 2002.



Va, pensiero, sull'ali dorate;
va, ti posa sui clivi, sui colli,
ove olezzano tepide e molli
l'aure dolci del suolo natal!
Del Giordano le rive saluta,
di Sionne le torri atterrate...
Oh mia patria sì bella e perduta!
Oh membranza sì cara e fatal!
Arpa d'or dei fatidici vati,
perché muta dal salice pendi?
Le memorie nel petto raccendi,
ci favella del tempo che fu!
O simile di Solima2 ai fati
traggi un suono di crudo lamento,
o t'ispiri il Signore un concento
che ne infonda al patire virtù.
che ne infonda al patire virtù
che ne infonda al patire virtù
al patire virtù!.




¡Ve, pensamiento, con alas doradas,
pósate en las praderas y en las cimas
donde exhala su suave fragancia
el dulce aire de la tierra natal!
¡Saluda las orillas del Jordán
y las destruidas torres de Sion!
¡Oh, mi patria, tan bella y perdida!
¡Oh recuerdo tan caro y fatal!
Arpa de oro de fatídicos vates,
¿por qué cuelgas muda del sauce?
Revive en nuestros pechos el recuerdo,
¡Que hable del tiempo que fue!
Al igual que el destino de Sólima
Canta un aire de crudo lamento
que te inspire el Señor un aliento,
que al padecer infunda virtud,
que al padecer infunda virtud,
que al padecer infunda virtud,
al padecer, la virtud!.


martes, 5 de julio de 2016

Rossini. Celeste providenza

La música escénica, es decir, la ópera, no es propiamente música sacra. sin embargo, abundan los fragmentos de oración que llegan a alcanzar cumbres sublimes.  A ellos vamos a dedicar algunas entradas, y comenzaremos por una obra de Rossini: el Asedio de Corinto. Se trata de una ópera de género heroico, que se centra en el asalto y destrucción de la ciudad de Corinto a manos de Mahomet II, conquistador de Constantinopla.

El fragmento del Asedio de Corinto al que nos referimos se titula Celeste Providenza. Es un terceto, entre la protagonista, Pamira; su prometido Neocles (interpretado, según las convenciones de la época por una mezzo soprano) y su padre Cleomene. La ciudad está a punto de perecer e invocan la misericordia de Dios, para que los libre de las manos de los infieles. La interpretación de esta difícil partitura corre a cargo de tres grandes cantantes. la soprano Beverly Sills, la mezzo-soprano Merilyn Horne, y el tenor F. Bonisolli.


PAMIRA, NEOCLE, CLEOMENE
Celeste provvidenza,
il tuo favor imploro:
dà temine ai martiro
d'un popolo fedel.
Celeste provvidenza,
pietade all'innocenza
giammai negava il ciel.
Celeste provvidenza,
il tuo favor imploro, ecc.

PAMIRA
Oh padre!

CLEOMENE
Andar conviene.

NEOCLE
Pamira! Addio mio bene.

PAMIRA, CLEOMENE, NEOCLE
Ci rivedremo in ciel...

sábado, 2 de julio de 2016

Vivaldi. Magnificat (RV 610)

En la memoria de santa Isabel, escuchamos el Magnificat, el cántico de la virgen en la visitación a su prima. Hemos escogido la versión de Vivaldi (RV 610), en la versión de Jordi Savall.

viernes, 1 de julio de 2016

Miserere mei Deus, Philippe de Monte

Escuchamos hoy el Miserere mei Deus  de Philippe de Monte (1521-1603), maestro flamenco nacido en Malinas. Esta pieza me ha venido a la memoria al leer el evangelio de la tempestad que hoy escuchamos en la liturgia. Los apostoles acuden a Jesús y le piden que tenga misericordia d ellos, "¡Señor, sálvanos, que nos hundimos!"

De Monte fue el más importante representante de la escuela flamenca de finales del Renacimiento y todo un experto en la composición de madrigales. Es posible que recibiese su primera formación en Malinas. Estuvo en Inglaterra en la capilla de Felipe II cuando fue a casarse con María Tudor; se supone que De Monte dejó la capilla porque era el único integrante no español de la misma. Fue maestro de capilla del emperador Maximiliano II y pasó el final de sus días al servicio de la catedral de Cambrai. La interpretación se debe al conjunto Cinquecento Vokal Vienna.